sábado, diciembre 09, 2006

"Freud y Lagos Weber" *


Existe una época del desarrollo en los niños, en que los padres representan las máximas virtudes. Es un tiempo de admiración ciega, que suele terminar más o menos abruptamente en la adolescencia. Sin embargo, hay casos en que esa admiración ciega e incapaz de crítica se prolonga hasta la adultez. Estamos entonces ante un transtorno, estudiado en profundidad por Freud. Este puede llevar al individuo a una incapacidad para percibir rasgos relevantes de la realidad. En esos casos, se requiere tratamiento y el pronóstico es generalmente favorable.

Al parecer, el ministro Lagos Weber sufre de un transtorno como el descrito. A muchos les puede haber provocado incluso cierta ternura la forma como el Ministro Secretario General de Gobierno se refirió a su padre, en relación a los casos de corrupción descubiertos en el último tiempo. El Ministro llamó a su papá “Reserva Moral de Chile”. Sin embargo, atendida la adultez de Lagos Weber, el caso debiese generar preocupación.

En efecto, la tierna afirmación del Ministro no resiste la menor contrastación con la realidad. La verdad es que por donde ha pasado Lagos, siempre han ocurrido cosas raras. ¿Alguien recuerda el caso de las “Aulas Tecnológicas”, ese equipamiento por el que el Ministerio de Educación pagó varias veces su valor a un empresario español ligado al PSOE? ¿Alguien recuerda quién era el Ministro de Educación bajo cuya gestión se realizó la curiosa operación?... Por supuesto, Lagos nada supo.

Dentro de este “Inventario de las Sombras”, se encuentra, cómo no, el mar de irregularidades que convirtió al Ministerio de Obras Públicas en el epicentro de la corrupción en Chile. Sobresueldos, triangulaciones y demases fueron el pan de cada día. Los directamente implicados fueron los hombres de mayor confianza de Lagos, como su propio pariente, Matías de La Fuente. Por supuesto, Lagos nada supo.

Pero hay un caso donde nos consta que el ex-Presidente sí supo. Sucedió al comienzo de su mandato. Como parte de la repartición del botín electoral, Lagos nombró como su primer Subsecretario de Pesca, al hasta entonces empresario salmonero y presidente de Salmón Chile, Daniel Albarrán. Lagos no tuvo escrúpulos, en este caso, en poner “al gato a cargo de la pescadería”, algo impresentable desde el punto de vista ético. Pero Lagos no sólo cometió ese acto, sino que cuando algunas organizaciones ambientales denunciamos el hecho a los tribunales por ser constitutivo de delito, el mandatario recurrió a todos los medios para quedar en la impunidad. Cuando en el marco de la investigación judicial en curso, pedimos la comparecencia de algunos testigos claves, Lagos se movilizó rápidamente para acallarlos. Eso sucedió con un diputado de la Concertación que había conocido los entretelones del caso y que había sido muy crítico con la designación de Albarrán. El Estadista citó a Palacio al parlamentario y lo instó a que no dijera en estrados lo que debía decir. El diputado se doblegó y cambio su versión a la hora de comparecer al llamado de los tribunales. Así, la causa pudo ser archivada. Esto lo supimos posteriormente, de boca del mismo diputado, que avergonzado, trataba de explicarnos su sorprendente cambio.

Ese es el verdadero Lagos, el que está detrás de las frases rimbombantes y de los arranques autoritarios.

Dadas estas características de Lagos, nadie debió extrañarse cuando tampoco tuvo inconvenientes en compartir la mesa con Luksic, en los precisos momentos en que sobre este “destacado empresario” pesaba una orden de captura internacional. Al fin y al cabo, Luksic era perseguido en Perú sólo por actos de corrupción. “Hojarasca”, debe haber pensado Lagos.


Señor Ministro, ese es Papá. Puede ser doloroso, pero ya debe enfrentarlo.




Publicado en El Mostrador, 8 de diciembre de 2006.

viernes, julio 07, 2006

¡¡¡ VIVA LA REGENERACION CICLISTA DE LA TIERRA !!!


A propósito del alza del precio internacional del petróleo, hemos visto en los últimos días un verdadero peregrinaje de distintos sectores políticos hacia el Ministerio de Hacienda, solicitando una rebaja del impuesto a los combustibles.
A algunos pareciera que el impuesto a los combustibles les resulta injustificado; pero sin dudas, es uno de los gravámenes que tienen mayor fundamentación hoy en Chile y en el mundo. Los costos que impone el tráfico motorizado a nuestra sociedad son innumerables. A título meramente ejemplar señalemos:

· Muerte y enfermedad por el aire que envenena.
· Muerte y daño para las personas por los accidentes que causa.
· Pérdida de la paz por el ruido de motores, bocinas usadas indiscriminadamente e infernales alarmas.
· Congestión, que aumenta la contaminación del aire y el ruido.
· Derroche de importantes recursos financieros y de la escasa tierra fértil para edificar nuevas vías y estacionamientos.
· Destrucción del tejido urbano causado por la construcción de autopistas.
· Mayor dependencia económica del país por la importación de combustibles.
· Daño a la biósfera por la emisión de gases de efecto invernadero.

Aún no estamos ni siquiera en condiciones de dimensionar el daño para la humanidad que está provocando el desequilibrio del clima del planeta, causado principalmente por la quema de combustibles fósiles. ¿Cuál es el impuesto justo para compensar ese daño?

Estudios recientes han demostrado que el material particulado que los motores emiten y los vehículos recirculan provoca daño genético. ¿Cuál es el impuesto justo para compensar un daño en nuestros futuros hijos, nietos, bisnietos....?

El impuesto a los combustibles no puede compensar ni remotamente los daños provocados a la humanidad presente y futura y a todos los otros seres de la biósfera por la adicción petrolera de nuestra sociedad. Debiese por tanto ser aumentado, como un mecanismo que desincentive efectivamente una conducta profundamente dañina. Al menos su mantención, combinada con el alza del precio internacional, permite que se restrinja su uso y que exista un incentivo para en primer lugar, reducir el derroche y en segundo lugar, desarrollar energías renovables y mucho menos destructivas.

Desgraciadamente, es posible observar una profunda incoherencia en las políticas públicas de los últimos gobiernos en Chile sobre este tema tan central. Si bien es cierto hasta el momento se ha mantenido el impuesto, ya antes se subsidió la adicción petrolera mediante la “estabilización del precio”. En el transporte de larga distancia, el gran impulso ha ido justamente para desarrollar el transporte carretero, mientras que el ferroviario, si bien ha presentado una pequeña modernización, ni siquiera alcanza los niveles de cobertura que tuvimos en Chile cuarenta años atrás. En la urbe, el Presidente inaugura orgulloso autopistas urbanas, que son un gran estímulo al uso del automóvil, así como los estacionamientos subterráneos en el centro de la ciudad. Lo que es aún más grave, favoreciendo a los grandes especuladores inmobiliarios, se ha dado luz verde a la expansión urbana sobre las tierras agrícolas, que alarga las distancias que es necesario recorrer y al mismo tiempo nos priva de fuentes cercanas de abastecimiento de productos agrícolas.

El modelo de transporte que se impone hoy es insustentable y nos hace cada vez más vulnerables. Como bien lo saben los militares, alargar las líneas de abastecimiento es una de las formas más seguras de ser destruido. Lo que se requiere es una profunda modificación de nuestras formas de vida, que apunte fundamentalmente a la reducción del transporte y a reemplazar transporte destructivo por otro más inocuo. En el primer campo, las modernas tecnologías de comunicación están haciendo ya un aporte muy relevante, con el surgimiento de fenómenos como el tele-trabajo y la tele-educación o en alguna medida el tele-comercio. En el segundo, un real fomento del transporte ferroviario en las largas distancias y del transporte no motorizado en la ciudad, peatonal o en bicicleta, ofrecen muchas posibilidades de disminuir nuestro impacto sobre el planeta sin reducir nuestra calidad de vida, sino incluso, mejorándola. Pensemos en la no inusual imagen de un deportivo ciclista versus la de un obeso automovilista, encerrado en su asfixiante habitáculo en medio de la congestión urbana. Liberarse de la adicción petrolera, como liberarse en general de toda adicción, es un avance hacia una mayor plenitud humana.

Luis Mariano Rendón E
Coordinador
Movimiento Acción Ecológica

domingo, mayo 14, 2006

La Mano del Estadista

El ex presidente Ricardo Lagos saltó a la fama por el hábil uso de su dedo índice, el cual esgrimió a guisa de florete, para desafiar televisivamente a Augusto Pinochet.

Sin embargo, una vez que asume la presidencia, Ricardo Lagos demuestra que posee una gran habilidad con toda su mano, no sólo con uno de los dedos. Esa habilidad le permitió usar su diestra en forma versátil de acuerdo al tipo de desafío que debía enfrentar en la conducción de los altos intereses de Chile.

Todos recordamos el episodio en que el distinguido empresario, Andrónico Luksic, fue acusado por los tribunales peruanos de tráfico de influencias con el señor Vladimiro Montesinos. Esto, para viabilizar uno de sus emprendimientos, cuestionado por razones ambientales. En esos días, la mano de Lagos fue cálida y protectora y se extendió en auxilio de la persona y honra del compatriota. Lagos no dudó en compartir la mesa con el señor Luksic, en los precisos momentos en que se despachaba contra éste una orden de captura internacional. Ese fue un gesto de solidaridad con un chileno perseguido, que el país jamás olvidará. Resultado de muchas cosas, los tribunales peruanos declararon prescrita la responsabilidad penal del señor Luksic, aunque su contertulio, el señor Montesinos, fue condenado por el mismo caso a 4 años de prisión.

En relación, en cambio, al conflicto mapuche, la mano de Lagos supo ser firme y castigadora. Empleando con sabiduría una de las obras de su antiguo contendiente, no le tembló el pulso para usar la Ley Antiterrorista en la persecución de los ilícitos cometidos, aún cuando existiese una normativa común que sancionara los mismos hechos. Había que dar una señal enérgica de que la justicia se aplica, sin distinciones.

Luis Mariano Rendón, abogado, profesor de Derecho Ambiental y Etica Ecológica

viernes, mayo 05, 2006

Disculpe, Presidente Morales.


Llama la atención hasta dónde el fanatismo ideológico puede llevar a una persona, aparentemente inteligente y con largos estudios, a actuar en forma extremadamente torpe. Esto puede ser penoso cuando quien así procede es un particular, que no compromete más que su propio prestigio e intereses. Pero cuando el fanático habla no por él, sino representando supuestamente a una Nación, el tema es grave.

En un acto de profunda deslealtad hacia un pueblo hermano, en los momentos que más apoyo necesitaba, el canciller chileno, Alejandro Foxley, obnubilado por su fanatismo neoliberal, se dio el lujo de atacar la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos decretada por el Presidente Evo Morales. En efecto, casi más rápido que los representantes de los países cuyas trasnacionales eran afectadas, Foxley declaró, amenazante, que con su decisión Bolivia “afectaba los procesos de integración en Latinoamérica”. Habló al día siguiente del anuncio boliviano, demostrando que decía sólo lo que salía de su pequeña alma mercantilista y que ni siquiera había habido un mínimo análisis político de la situación. Con esto, Foxley clavaba un puñal por la espalda a un país que está haciendo esfuerzos para terminar con el saqueo que históricamente ha sufrido de sus riquezas, saqueo que ha sido un común denominador de nuestra América Latina.

Las torpes declaraciones de Foxley no sólo demostraron la falta del más mínimo sentido latinoamericanista, sino que también, la carencia del tino político básico que debe poseer un ministro de relaciones exteriores, sea cual sea su ideología. Al parecer, Foxley no pudo esconder la ira que le provoca el que un pueblo decida escribir la historia por su propia mano y que no siga sumisamente los dictados del mercado global. Cómo no adivinar en sus palabras, el desprecio que le causa a él, doctorado en economía en una Universidad del Imperio, como tantos fraudes de economistas que han sido funcionales al saqueo, el atrevimiento boliviano. El atrevimiento de una Nación que desafía los supuestos de la doctrina que él bebió ávida y sumisamente en el manantial del norte. Cómo no adivinar también, detrás de las apresuradas bravatas del ministro carapálida, el desprecio racista por quien es representante de un pueblo originario de estas tierras, que decide ser la voz de su gente y no un servidor de los poderosos.

Nos preguntamos, ¿atacó Bolivia la decisión legítima del pueblo chileno de nacionalizar su cobre en 1971?. Por supuesto que no. Lo que recibió Chile de Latinoamérica cuando el Congreso Nacional aprobó por unanimidad la nacionalización de nuestra principal riqueza, fue respeto. Bolivia y todos nuestros vecinos, respetaron. En muchos casos recibimos cariño, un profundo apoyo e incluso admiración, pues los pueblos sabían que la lucha de Chile era la de todo el continente.

Es cierto que la nacionalización del cobre chileno es un tema de interés más bien histórico, pues la dictadura de Pinochet y luego los gobiernos concertacionistas, han vuelto a entregar el cobre a las transnacionales. Hoy la empresa estatal, CODELCO, extrae sólo el 30%, y el 70% se lo llevan transnacionales de origen fundamentalmente norteamericano, dejando en Chile sólo migajas y claro, una gran devastación ecológica. Pero el paso histórico dado por Bolivia debiera demostrarle a Foxley que los vientos de la historia comienzan a soplar en otra dirección, distinta de la que aprendió en sus manuales gringos.

La falta de criterio demostrada por Foxley queda expuesta en toda su desnudez, cuando leemos las declaraciones de los presidentes de Argentina, Venezuela y Brasil, que deciden apoyar la decisión boliviana. Explícitamente, el gobierno de Brasil señala "…la decisión del gobierno boliviano de nacionalizar las riquezas de su subsuelo y controlar su industrialización, transporte y comercialización, es reconocida por Brasil como inherente a su soberanía”. Lógicamente, Brasil, cuya empresa Petrobras fue afectada por la nacionalización, buscará un acuerdo que preserve razonablemente sus intereses, pero en el marco del respeto a la decisión boliviana. El secretario de estado para asuntos exteriores de España, Bernardino León, se manifestó también en términos de respeto a la decisión boliviana, al llegar a La Paz para negociar los términos en que esta se implementará respecto de los intereses españoles. Es decir, como decimos en Chile, Foxley, ridículamente, fue “más papista que el Papa”. Tanto, que debió aparecer la Presidenta, relativizando sus declaraciones.

El paso dado por Bolivia debiese alegrar a todo latinoamericano bien nacido. Que su riqueza en hidrocarburos, un don de la Tierra esencialmente agotable, empiece a beneficiar principalmente a los bolivianos, es una gran noticia. El bienestar de Bolivia es el bienestar de Latinoamérica. Eso es una verdad del tamaño de la cordillera de los Andes. Los pueblos del continente son solidarios y son, verdaderamente uno. Esto no es una declaración de buenas intenciones, sino una realidad que los fenómenos de migración al interior del continente se encargan de demostrar. Tenemos un destino común, les guste a algunos o no.

Como dijo un trovador en una ocasión, es una gran responsabilidad hablar a nombre de un pueblo, pero creo que no me equivoco si a nombre de la gran mayoría de los chilenos, pido disculpas al Presidente Morales y al pueblo boliviano por la torpeza del Canciller chileno.

Luis Mariano Rendón, abogado, profesor de Derecho y Etica Ambiental, coordinador del movimiento Acción Ecológica. lmrendon@accionecologica.cl

viernes, abril 28, 2006

Lagos, la Etica y el Poder


Etimológicamente, mentir está emparentado con mente. Ambos vienen de la misma raíz indoeuropea “mn-ti” que significa “pensamiento”. La relación es, evidentemente, que en el caso de la mentira, hay una creación mental a través de la cual se pretende ocultar la verdad. Como es una creación mental, seguramente las personas a las que se les atribuye una inteligencia sobresaliente, también pueden pensar que tienen una capacidad especial para mentir eficazmente.

Pero como decía mi abuelita, transmitiendo la sabiduría antigua de nuestro pueblo, “más luego se pilla a un mentiroso que a un ladrón”. Y parece que ese adagio popular termina siempre resultando cierto. Muchos, en la cima del poder, seguramente piensan que están inmunes y que podrán ocultar permanentemente lo que no les conviene. Pero la verdad parece que tiene una impertinente tendencia a aflorar. Al igual que las plantas, ama la luz del sol y la busca, la persigue. Eso lo ha aprendido muy bien Pinochet, que seguramente jamás se imagino que sus crímenes y robos serían descubiertos y juzgados.

El significado del mentir está ligado a negarle la verdad a quien debe saberla. Miente, no solamente quien dice expresamente algo contrario a la verdad, sino también quien no dice lo que debe decir, quien omite la verdad. De allí la conocida exigencia judicial a quien presta testimonio: “¿juráis decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad?”.

Quien ahora ha empezado a conocer la tendencia heliotrópica de la verdad, es el ex presidente Ricardo Lagos. Hoy está quedando en evidencia que durante su mandato logró ocultar muchas cosas que no le convenían. Seguramente eso estuvo en la base de la alta aceptación que mostraba en las encuestas de popularidad.

Durante algún tiempo al menos, Lagos logró ocultar, por ejemplo, que había nombrado a representantes de intereses económicos privados para que gestionaran los asuntos públicos relativos a las mismas áreas donde realizaban sus negocios. Se violaron así las escasas normas sobre probidad existentes en Chile. Esto sucedió con su primer subsecretario de pesca, el hasta entonces empresario salmonero y presidente de Salmón Chile, Daniel Albarrán. Lagos no tuvo escrúpulos, en ese caso, en poner “al gato a cargo de la pescadería”, para seguir con nuestros refranes. Cuando a partir de una denuncia nuestra, los tribunales investigaron este tema, que además de falta administrativa constituía el delito de nombramiento ilegal de funcionario público, Lagos se movilizó rápidamente para acallar a los testigos que llamamos a declarar. Eso sucedió con un diputado de la Concertación que había conocido los entretelones del caso. El Estadista citó a Palacio al parlamentario y lo instó a que no dijera en estrados lo que debía decir. El diputado se doblegó y cambio su versión a la hora de comparecer al llamado de los tribunales. Así, la causa pudo ser archivada. Esto lo supimos posteriormente, de boca del mismo diputado, que avergonzado, trataba de explicarnos su sorprendente cambio.

Pero hay otros casos en que la verdad todavía no ha logrado ser dilucidada. ¿Alguién recuerda el caso de las “Aulas Tecnológicas”, ese equipamiento por el que el Ministerio de Educación pagó varias veces su valor a un empresario español ligado al PSOE? ¿Alguién recuerda quién era el Ministro de Educación bajo cuya gestión se realizó la curiosa operación?...Correcto, el mismo.

Dentro del “Inventario de las Sombras” del Estadista, se encuentra, cómo no, el mar de irregularidades que convirtió al Ministerio de Obras Públicas en el epicentro de la corrupción en Chile. Sobre eso, ha dicho don Ricardo que desconocía lo que ocurría en materia de sobresueldos, triangulaciones y demases. Desconocía todo, pese a que los directamente implicados eran sus hombres de mayor confianza, como Carlos Cruz. o su propio pariente, Matías de La Fuente. ¿Alguién cree que Lagos verdaderamente no sabía?

Hoy, sabemos que Lagos no le dijo tampoco la verdad al país, ni siquiera a los propios familiares, respecto de los errores del Servicio Médico Legal cometidos en la identificación de algunas de las víctimas de la dictadura. Prefirió guardar silencio, para evitar los costos políticos. No le importó que las madres, esposas o hijos, siguieran llevando flores al lugar equivocado, pensando que ahí, cómo le habían dicho las autoridades, estaban los restos de sus seres queridos.

¿Si el Estadista fue capaz de ocultar la verdad sobre todas estas cosas, sobre cuántas más también lo hizo?

Luis Mariano Rendón, abogado, profesor de Derecho y Etica Ambiental. lmrendon@accionecologica.cl